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jueves, 29 de agosto de 2013

Más allá de los míticos cigarrillos "Celtas Cortos" y del "Celta de Vigo" ¿Hubo o no Celtas en Galicia?

                          Celtas en la niebla

 Plinio, Estrabón y Mela hablan de los keltikoi celticiasí como de los kalaikoipara referirse a un pueblo celta asentado en la esquina noroeste de Iberia (Galicia) desde comienzos del primer milenio a.C. en el Noroeste peninsular.

Luis Negro Marco / Santiago de Compostela

Mapa de la Península ibérica en el año 133 antes de Cristo. La celtiberia se extiende por las
actuales provincias de Zaragoza, Teruel, Soria, Guadalajara.- Galicia recibe el nombre de Galaecia
Con el nombre de Gallaecia, los romanos denominaron a una de las cinco provincias en que dividieron a la Península tras su conquista. Galos o Gallegos, el caso es que si a una región de España hay que calificarla con el adjetivo de celta, esa es sin duda Galicia. Una presunción que
Circulo de piedras perteneciente a la cultura celta, junto al
mar. Asociado a la cultura de los castros, con casas, también,
de forma predominantemente circular.
arranca ya en el
siglo XVI, si bien la consideración de los celtas como antepasados de los gallegos, es una creación romántica del XIX, siglo en que eruditos e historiadores gallegos empezaron a considerar a los castros como verdaderos monumentos célticos erigidos para plantar y adorar en ellos encinas, árbol sagrado, en honor al dios celta Teut.  Y más aún, en una interpretación Bíblica de la Historia, algunos autores, como Vicetto, aluden al Diluvio Universal y posterior llegada de Túbal (descendiente de Noé) a España. Túbal, según Vicetto habría dado Galicia a su hijo Brigo, quien a su vez habría elegido para vivir un lugar indeterminado entre Fisterra y Ortegal. Así es como hoy en día a esa zona se le conoce con el nombre de golfo o costa brigantina.
 
Los petroglifos, circulos de evocación solar tallados en piedra
atrbuibles a la cultura celta, son característicos de Galicia y Portugal
Por otro lado, la reafirmación romántica sobre la
celticidad de Galicia, se tradujo en considerar al Cristianismo como elemento aglutinante de la supuesta población celta primigenia con la germánica de los pueblos invasores suevos y vándalos.
  A finales del XIX, la celticidad de Galicia, estaba puesta, por tanto, fuera de toda duda. Galicia:  “Antiguamente, Gallaecia: una de las cinco provincias en que dividió la Península el emperador romano Constantino. Comprendía el país de los Gallecos (sic) y de los Astures. “Los Gallecos eran individuos de un pueblo celta y se dividían en Gallecos Brácaros y en Gallecos lucensis. La capital de los primeros era Brácara Augusta (Braga) y la de los segundos, Lucus Augusta (Lugo). Las ciudades más importantes eran: Portus Cale (Oporto); Tude (Tuy); Lambriaca, Brigantium y Adóbrica (Coruña y Ferrol o muy cerca de éstas); Aquae Calidae (Orense); e Iria Flavia (Padrón).
    Pero, primera decepción sobre la celticidad de Galicia: si recurrimos a la arqueología, nos
La mitología celta fue absorbida, en numerosas ocasiones, por
los conquistadores romanos. Aquí, representación del dios celta
Cornunus
encontramos con que el texto más extenso escrito en celta continental, de toda Europa, fue encontrado en un yacimiento arqueológico de
España que se encuentra, no en Galicia, sino en un lugar, nada menos que a casi mil kilómetros de aquí. El yacimiento en cuestión se llama Contrebia Belaisca (cuyo significado, es muy posible sea el de ciudad de los Belos -pueblo celta que estaba asentado entre Aragón y Guadalajara-) en el término de la localidad de Botorrita, a 20 kilómetros  al Este de Zaragoza. Y el lugar, no es un idílico paisaje druídico de robles y encinas, sino un duro páramo desértico, salpicado de espliegos y romeros. Y sin embargo, hace 2.400 años, Contrebia Belaisca, fue uno de los centros más importantes de los celtas peninsulares, denominados por los romanos: celtíberos, cuya cultura se diferenciaba claramente de los celtas clásicos europeos.
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Y segunda decepción sobre la celticidad de Galicia: La arqueología no ha encontrado cultura material  alguna característicamente celta en los yacimientos gallegos durante toda la Edad del Hierro (primer milenio antes de Cristo). Es así como los arqueólogos han venido en denominar a este período con el genérico e indeterminado nombre de cultura castrexa, derivado de su hábitat característico, el castro.
  Entonces ¿No hubo celtas en Galicia? Aunque resulte paradójico, con respecto a todo lo anteriormente expuesto, es muy posible que sí. De modo que los románticos del XIX, tenían razón: hubo celtas en Galicia, si bien, todas sus teorías para afirmar esa verdad, eran, curiosamente, falsas. En este sentido, es más que interesante la teoría del arqueólogo Francisco Javier González García de que la explicación celtista o perspectiva céltica en el Noroeste Peninsular,  tendría sentido, no desde la arqueología, sino desde la lingüística.
El trisquele, símbolo solar,
"principio y fin", siempre asociado
a la cultura celta, al igual que es
frecuente asociar los conceptos
"Galicia" y "Celta
Porque es muy probable  que la lengua celta sea muy anterior a la cultura genuinamente celta (denominada en arqueología como cultura de
La Tène (s.VII-II a.C.). Y precisamente, desde la lingüística, todo indica que estas lenguas celtas, a diferencia de la cultura de La Tène, no tendría su origen en Centro Europa, sino en el sector atlántico occidental de Europa, incluido el noroeste peninsular, es decir, Galicia.
 En vista de lo anterior, la arqueología, debería en consecuencia revisar el concepto de cultura castrexa  y abrir el campo de su investigación a nuevas interpretaciones. Sólo así los celtas de Galicia, podrán salir definitivamente de la niebla que los oculta.  

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