El largo camino hacia la Constitución de 1978 en España
Luis Negro Marco / Zaragoza
En el mes de julio de 1876, finalizada la
tercera guerra carlista, y situado en el trono de España Alfonso XII, hijo de
Isabel II, el político Cánovas del Castillo promulgaba una Constitución en
torno a la cual se aglutinaban todas las tendencias de opinión monárquica. La
Constitución de 1876 estuvo en vigor en España durante 47 años, siendo la más
longeva que hasta ahora ha tenido el país; y su principal virtud consistió en
que garantizaba la coexistencia pacífica de los partidos políticos, evitando
los pasados errores del “exclusivismo” que habían llevado a Isabel II al
destierro durante la Revolución liberal de 1868. Años más tarde (en septiembre de 1823) y ya
con Alfonso XIII en el poder, el general
Primo de Rivera daba un golpe de Estado, estableciendo una Dictadura militar
que dejaba en suspenso (pero no cancelaba) la Constitución de 1876. Dos años
después, en 1925, “el cirujano de hierro” apuntalaba su prestigio dirigiendo el
desembarco de tropas hispano-francés en la bahía de Alhucemas, hecho de armas
que precipitó la rendición del rebelde
Abd-el-Krim en 1926, y con ella el final de de la larga y sangrienta
guerra de España en Marruecos. No obstante, en 1928, y ante el creciente
Año 1915; celebración festiva de de familias carlistas en la localidad aragonesa de Villarroya |
----------------------------------------------------------------------------------------------------
La Constitución republicana de 1931 permaneció
vigente hasta el 1 de abril de 1939,
finalizada la guerra civil, al ser abolida por Franco, quien como “Caudillo de España por
la Gracia de
Dios”, inauguró en aquel año una larga dictadura de 36 años que no finalizó hasta su muerte, en noviembre de 1975.
Durante el franquismo el Estado se rigió de acuerdo al “Fuero de los
Españoles”, formulado en 1945 como una Carta de Derechos para dar apariencia
democrática ante los aliados victoriosos de la II Guerra Mundial; sin embargo
este Fuero no proporcionaba ninguna salvaguarda legal a la ciudadanía, de
manera que según alguno de ellos declaró: “con Franco los ministros eran como
“reyes” dentro de su propio ministerio pero verdaderos “sacristanes” en
relación con el Caudillo”.
Maniobras de tropas de caballería en las inmediaciones de la localidad zaragozana de Ateca en torno al año de 1916 |
Pero un grave suceso acaeció el 20 de
diciembre de 1973, cuando la banda terrorista ETA asesinó al almirante Carrero
Blanco en Madrid, nombrado seis meses antes primer ministro de la Dictadura. El
“Régimen” languidecía y se aproximaba a su final. De este modo, el 22 de
noviembre de 1975, dos días después de la muerte de Franco, Juan Carlos I era
coronado rey de España, iniciándose la Transición democrática, que abría las
puertas a la libertad y la esperanza. Con la Transición, se creó un espacio
nuevo de consenso histórico que posibilitó (siendo Adolfo Suárez el Jefe de
Gobierno) la celebración de un referéndum en diciembre de 1976 por el que se
aprobó la Ley para la Reforma Política de España. Sin embargo, meses antes de este referéndum,
el 9 de mayo de 1976, se habían producido los graves sucesos de “Montejurra”
(monte navarro al que los carlistas habían acudido en número de miles a su
celebración anual). Aquel día terroristas afines a la rama ultra de los
carlistas (los partidarios de Sixto de Borbón-Parma, hermano del pretendiente
Carlos Hugo) asesinaron a sangre fría a
dos de los partidarios de éste último,
hiriendo de gravedad a varios más. No fue el único acontecimiento relevante de
aquel año, pues fue también en 1976 –camuflando su apariencia bajo una
estrafalaria peluca– cuando Santiago Carrillo entró clandestinamente en España,
siendo pronto detenido por la Policía.
Portada del libro "la larga marcha
hacia la Monarquía", escrito en 1979 por el político español Laureano López Rodó |
Así que, muy lejos aún lejos de alcanzar una
cierta estabilidad, el 24 de enero de 1977, terroristas de extrema derecha
asesinaron en su despacho en Madrid a cinco abogados laboralistas próximos al
Partido Comunista; un trauma que conmocionó a España, que temió el regreso a
los peores momentos de la represión política. Sin embargo, Suárez no estaba
dispuesto a ceder a ningún chantaje y el 9 de abril de 1977 posibilitaba la
legalización en España del Partido Comunista, celebrándose dos meses después
las primeras elecciones democráticas en el país desde 1936.
Finalmente, el 6 de diciembre de 1978 los
españoles aprobaban mediante referéndum, la actual Constitución española. La Carta Magna establece a España como una
Monarquía constitucional y un Estado autonómico, cristalizados en un régimen
democrático estable y plural, que a lo largo de 35 años ha ido convirtiendo a
nuestro país en una más de las naciones relevantes de Europa, recobrando
también un destacado papel intercontinental, especialmente en cuanto a las
relaciones con los países de habla hispana se refiere, con quienes nos unen no
solo fuertes lazos culturales sino también dinámicas y robustas relaciones
económicas. Desde aquel histórico 6 de diciembre de 1978
ha sido mucho el camino que se ha recorrido en España y (en vista de la grave
crisis por la que actualmente está atravesando la nación) mucho aún es el
camino que queda por recorrer, pero siempre por la senda de la Democracia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.