P. Ignacio de Nicolás, escolapio: Exégesis del Evangelio del domingo, 19 de julio

Firmas invitadas

 (P. Ignacio de Nicolás, escolapio)

XVI Domingo del tiempo ordinario: La vuelta de la Misión.- El Descanso

(Mc 6, 30-24) 

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P. Ignacio de Nicolás, escolapio

El evangelio de hoy trata de dos situaciones diferentes: la vuelta alegre de los apóstoles, contando su misión como un éxito y el descanso necesario porque ni para comer había tiempo suficiente.  ALEGRÍA DE LA VUELTA: Y se reúnen los apóstoles junto a Jesús y anunciaran a Él todas las cosas y cuantas hicieron y enseñaron (30).Y les dijo: Venid vosotros mismos en particular a un lugar deshabitado un lugar deshabitado y descansad un poco. Eran pues los que venían y salían juntos y ni para comer tenían oportunidad (31).  Et convenientes apostoli ad Iesum renuntiaverunt illi omnia quae egerant et docuerant. Et ait illis venite seorsum in desertum locum et requiescite pusillum erant enim qui veniebant et rediebant multi et nec manducandi spatium habebant. Marcos los llama "apóstoles", que significa enviados, del verbo apostellö que significa enviar, y apóstol es en general embajador o delegado. Actuaban en nombre de Cristo e su misión era la de anunciar la Buena Nueva del Evangelio, o sea, un anuncio de parte de Dios de un perdón total y de una reciente actitud divina en que está dispuesto Dios a adoptar como hijos en el Hijo a hombres de cualquier raza y condición. Después de la caminadas y el trabajo del apostolado, la aglomeración de las gentes que buscaban remedio para sus enfermedades, daba como resultado que no tuviesen tiempo ni para comer. El descanso era necesario. Algunos autores hablan de que los apóstoles estaban demasiado entusiasmados con un Reino material. Jesús debía, como lo hizo tantas veces, tirar esa idea errada de la cabeza de los discípulos, así como de que las sanaciones eran lo más esencial del nuevo ministerio. Jesús debía enseñarles los principios fundamentales y por eso era conveniente un retiro especial. EL DESIERTO: Y subiendo al barco fueron a un lugar inhóspito solos (32).Y las multitudes  vieron a ellos apartándose y lo conocieron muchos; y corrieron a pie de todas las ciudades allí, y se adelantaron a ellos y se reunieron a Él (33). Et ascendentes in navi abierunt in desertum locum seorsum. Et viderunt eos abeuntes et cognoverunt multi et pedestre et de omnibus civitatibus concurrerunt illuc et

praevenerunt eos. El desierto era un lugar inhóspito, deshabitado, no el desierto de arena que estamos acostumbrados a imaginar. A ese lugar fue Jesús de barco. El lugar syaba erca de a ciudad de Betsaida [casa de pesca]según Lucas (Lc 9,10). Era la Betsaida Julia de la Gaulanitide. Según Mateo, la causa de retirarse al otro lado del mar de Galilea o Tiberiades fue haber oído el asesinato del Bautista por Antipas (Mt 14,13). Se entiende así el término para la margen puesta (Mt 14,22) que comenzaba precisamente al otro lado del Jordán, de su desembocadura en el lago, que justamente no pertenecía a los dominios de Antipas, sino a los de su hermano Filipo. Con eso Jesús alcanzaba dos propósitos: huir de las turbas y huir de Antipas caso éste quisiese perseguirlo como hizo con el Bautista. Betsaida distaba de Cafarnaún [ésta siendo la ciudad donde moraba Jesús] 2 o 3 Km tanto por mar como por tierra. Eso permite entender el versículo siguiente: Y vieron ellos, apartándose, las multitudes y lo conocieron muchos, y corrieron a pie de todas las ciudades allí y se adelantaron a ellos y se reunirán a El (33). Visto que la distancia era pequeña y que los barcos no se distanciaban mucho de tierra, y que su velocidad no era grande, podemos entender perfectamente este versículo. Teniendo el barco siempre a la vista corrieron a pie, adelantándose al barco, de modo a que cuando llegaron a la margen, estaban allí esperándolos.

LA FRASE: No se puede conceder todo a todos. Decir no es tan importante como conceder.